Una noche más, ooohhhh (como diría Jennifer)

Una noche más, ooohhhh (como diría Jennifer)

No sé cómo serás vuestras noches, pero yo cada vez que llega la hora de irse a la cama me entra un temor que no os lo podéis imaginar…

Ya os contaba la semana pasada cómo noche tras noche vamos sobrellevando la cosa como podemos.
Nos vamos a la cama pronto porque estamos todos cansados y a las 10:00  todos estamos acostados. 
La pulguita se engancha a la teta y enseguida se queda dormida, ¡esto promete ser una noche tranquila! (PERO PARA QUÉ LO PIENSAS SIQUIERA?? LOCA!) 
Pues no, no lo es. A eso de las 12.30 se despierta llorando como una loca que la pobre gata pega un salto que no sabe ni lo que pasa. Le pongo a chupetín y parece que funciona y se calma. 
Al rato me huele raro… venga a cambiar ese culo con la correspondiente juerga que nos entra con los ojos como platos y dándose la vuelta como la niña del exorcista, que ella lo que quiere es gatear y ponerse de pie, no boca arriba. 
Volvemos como podemos a la cama y cuando ya se tranquiliza y parece que puedo dormir un poco, hay que comer otra vez. 
Yo ya parezco un mapache con las ojeras que me dan la vuelta. Y todas y cada una de las veces que me he tenido que levantar, Papá roncando como un oso. De hecho, me atrevería a decir que algunas de las veces que se ha despertado la pulga (que han sido más, pero tampoco es plan de narrar cada media hora), han sido por los ronquidos.
Y llegó la mañana y la hora de irse a trabajar. Despierto a Papá antes de irme y cuando el pregunto que qué tal ha dormido me dice: No sé lo que ocurre últimamente pero no descansamos, estoy agotado.
Me entra la risa y mejor me río porque si no yo no sé lo que hago! 
Me voy a trabajar mejor y ya nos vemos a la tarde…

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2 respuestas a “Una noche más, ooohhhh (como diría Jennifer)”

  1. […] y esa situación me estaba poniendo muy nerviosa. Además se sumó el cansancio de noche tras noche sin dormir bien y el estrés del trabajo. Esa noche no me sobraba paciencia precisamente. A la tercera vez que me […]

  2. […] Esa criatura que tienes en las manos llegará un momento en que te despierte por las noches, interrumpiendo tu descanso y tú no sepas bien cómo gestionar eso porque necesitas descansar y no entiendes por qué no puede simplemente dormir también! […]

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